Revolución e Independencia
La Fragilidad de las Armas. Reclutamiento, control y vida social en el ejército en la Ciudad de México durante la primera mitad del siglo XIX
El ejército mexicano del siglo XIX ha sido estudiado principalmente desde los enfoques de la historia política y militar. Esta historiografía nos ha develado la difícil conformación y consolidación de esta institución, que a su vez iba de la mano con los avatares del naciente Estado. Pero ¿qué se sabe de las personas que formaron parte de estos contingentes?, ¿qué tipo de vínculos establecían? Este libro intenta responder estas preguntas. A partir del estudio de expedientes judiciales, códigos, circulares, decretos y registros de filiación emitidos por el Ministerio de Guerra, así como de notas de prensa, diarios, tesis de medicina y demás soportes documentales, esta investigación pone el acento en las relaciones sociales de poder que vivieron los soldados con sus jefes inmediatos y sus pares, relaciones cargadas de violencia física y verbal, pero que a la vez estuvieron ancladas en la confianza y la solidaridad. Da cuenta además de que, para tener en pie al ejército, se contó con la colaboración de agentes externos a él (mujeres y comerciantes, principalmente), motivo por el cual sus miembros siempre estuvieron en contacto permanente con la población, demostrando que el ejército se constituyó no sólo a partir de la normativa impuesta por las autoridades, sino también por la práctica cotidiana de sus miembros.
La consumación de la independencia. Nuevas interpretaciones (Homenaje a Carlos Herrejón)
LA CONSUMACIÓN DE LA INDEPENDENCIA. NUEVAS INTERPRETACIONES (HOMENAJE A CARLOS HERREJÓN) reúne 19 ensayos de especialistas que se han planteado ofrecer una visión más rica y compleja del momento crucial que condujo a la separación definitiva de España. Sobre la base de investigaciones recientes, se analizan la trigarancia, los tratados de Córdoba, el discurso religioso y el pensamiento constitucional, en un contexto amplio americano, hispánico y atlántico, imprescindible para comprender una historia que se produce en diversos espacios. El libro hace, además, una aportación fundamental en el terreno de los estudios regionales que muestran las diversas dinámicas, la variedad de situaciones frente a los cambios que afectan a la América septentrional. Estudios sobre Puebla, Michoacán, Oaxaca, Yucatán o Zacatecas abren horizontes nuevos para comprender el proceso independentista y lo que vendría después. Este libro es el resultado de una serie de seminarios a los que fue convocado un amplio y representativo grupo de académicos dedicados al estudio de la Independencia. La iniciativa de discutir la consumación y conmemorar el bicentenario a la luz de nuevas aportaciones correspondió a Carlos Herrejón y la respuesta fue muy entusiasta. Se sumaron a ella más de 20 académicos que se reunieron periódicamente en coloquios y encuentros para preparar esta publicación. Recibieron el respaldo de varias instituciones: la Universidad Veracruzana, El Colegio de Michoacán, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla y la Universidad Nacional Autónoma de México. Los autores decidieron convertir estas páginas en un homenaje a Carlos Herrejón Peredo, por - su legado y su notable liderazgo en los temas de la independencia mexicana.
Un imperio constitucional. El inédito proyecto de Constitución del Imperio Mexicano de la junta nacional instituyente (Marzo de 1823)
El Proyecto de Constitución elaborado por la Comisión respectiva de la Junta Nacional Instituyente en marzo de 1823 a unos días de la caída del Imperio Mexicano confirma la vocación constitucional moderna que orientó el movimiento Trigarante desde su origen en Iguala y en Córdoba en 1821. Constitucionalismo moderno, es decir, liberal, si bien moderado, donde se establecieron límites claros al poder y se consagraron derechos del hombre como la libertad y la igualdad ante la ley dentro del respeto a las Tres Garantías: Independencia, Religión y Unión. Por vez primera se da a conocer este desconocido documento que no sólo habrá de iluminar y completar la historia constitucional mexicana sino la cultura jurídico-política de aquellos años, todavía tan poco conocidas debido a la miopía producida por una historiografía maniquea que no supo reparar en un proyecto político conciliador entre transición y modernidad, y sí en la pugna entre monarquistas y republicanos. Superada ésta, queda el ejemplo de un conjunto de “publicistas” que supieron dar respuesta a la urgencia de contar con una Constitución ad hoc, así como pensar en sus posibilidades como el instrumento idóneo para salvar y consolidar al Estado mexicano a la hora de su nacimiento.