Hay múltiples elementos que permiten observar en la campaña de pacificación de Sierra Gorda el desenlace interno de un conjunto de conflictos —guerras de castas, rebeliones, pronunciamientos, separaciones, golpes de estado, alianzas proamericanas— que se fueron aglomerando en torno a la noción de los rebeldes serragordanos. En especial porque estos habían establecido una breve alianza con el ejército norteamericano que implicó identificarla como un peligro a la integridad republicana, incluso una vez que las tropas estadounidenses abandonaron el país en junio de 1848.